GUADALAJARA,
PROVINCIA DE CASTILLOS.
Ciudades medievales, castros y castillos a través de esta ruta hacia la Sierra Norte.
Guadalajara es la segunda provincia de España más prolífera en lo que a Castillos se refiere.
Dentro de sus fronteras esconde 198 obras de arte que reflejan su historia. Desde las fortificaciones romanas hasta las construcciones militares que evolucionaron a palacios residenciales.
Sierra Norte de Guadalajara. Tierra de Fronteras
Codiciada por musulmanes y cristianos, Guadalajara y su posición fronteriza exigieron a ambos bandos la construcción de fortalezas defensivas que perduran hasta nuestros días.
Leer este apartadoUna ruta por los más bellos castillos desde Madrid a la Sierra Norte
Desde la alcarreña Torija hasta Pelegrina o Guijosa en el Río Dulce. Una ruta de 180 kilómetros perfecta para un fin de semana en la que recorremos algunos de los castillos más representativos de Guadalajara.
Leer este apartadoCastillos de Cine en Guadalajara
¿Quieres descubrir los castillos más filmados de Guadalajara? Las series y películas donde han aparecido los han convertido en imágenes muy reconocibles. La ruta 1000km entre castillos te desvela algunos de ellos.
Leer este apartadoTIERRA FRONTERIZA ENTRE CRISTIANOS Y MUSULMANES
Desde Galve de Sorbe hasta Zafra. Desde Zorita de los Canes a Villel.
Guadalajara esconde un vasto patrimonio medieval que se reparte por toda la provincia. Pertenecientes a diferentes etapas y con evoluciones dispares, algunos castillos están mejor conservados que otros, pero todos reflejan una parte de su historia.
Guadalajara esconde un vasto patrimonio medieval que se reparte por toda la provincia. Pertenecientes a diferentes etapas y con evoluciones dispares, algunos castillos están mejor conservados que otros, pero todos reflejan una parte de su historia.
¿Sabías que Guadalajara alberga entre sus fronteras el 8% del total de los castillos del territorio español?
Por eso, no es de extrañar que, recientemente, la Diputación de Guadalajara propusiese como parte de la oferta turística de la provincia la ruta Guadalajara: 1000 km entre castillos, como parte de su oferta turística.
Por eso, no es de extrañar que, recientemente, la Diputación de Guadalajara propusiese como parte de la oferta turística de la provincia la ruta Guadalajara: 1000 km entre castillos, como parte de su oferta turística.
Esta abundancia de castillos y fortalezas defensivas se debe a la situación estratégica de la provincia durante la Reconquista, puesto que se encontraba en terreno fronterizo entre reinos cristianos y musulmanes. De hecho, muchos de los castillos que mencionamos en nuestro recorrido, tienen raíces árabes.
Estos castillos tienen su origen en las grandes extensiones de terreno que los reyes de uno y otro bando concedieron a sus nobles feudales, con la condición de que ellos, a cambio, se encargarían de mantener el territorio conquistado.
Con este cometido construyeron grandes fortalezas defensivas en lugares estratégicamente elegidos que ya fueron de importancia para el imperio romano. Por ello es común que muchos de estos castillos medievales se situaran cerca de las que fueron las principales vías romanas, y en torno a las cuales se regía la vida política, social y económica del imperio.
Con este cometido construyeron grandes fortalezas defensivas en lugares estratégicamente elegidos que ya fueron de importancia para el imperio romano. Por ello es común que muchos de estos castillos medievales se situaran cerca de las que fueron las principales vías romanas, y en torno a las cuales se regía la vida política, social y económica del imperio.
UNA RUTA PARA DESCUBRIR LOS CASTILLOS DE GUADALAJARA
Es difícil delimitar una sola ruta por los castillos de Guadalajara, pues su patrimonio es tan amplio que podríamos recorrer la provincia entera.
Por eso, entre las infinitas opciones, hemos elaborado una propuesta que contempla los castillos que podemos visitar trazando un recorrido desde Madrid hacia la Sierra Norte de Guadalajara.
Esto incluye algunos monumentos que, si bien no se encuentran estrictamente en la Sierra, son merecedores de una visita si llegamos hasta ella desde Madrid.
En concreto, algunos de ellos se alzan muy cerca de lo que hoy día es la autovía A-2 y que, curiosamente, corresponde en parte con la que fue en su día la vía Emérita Augusta.
HACIA LOS CASTILLOS DE LA SIERRA NORTE DE GUADALAJARA
Fancy Image Box
Massive Dynamic has over 10 years of experience in Design. We take pride in delivering Intelligent Designs and Engaging Experiences for clients all over the World.
Un viaje a la Alcarria desde el Castillo de Torija
Nuestra primera parada es Torija que, aunque se encuentra estrictamente en la región de la Alcarria, es un buen punto de inicio de ruta para aquellos que vienen desde Madrid y además se encuentra en un excelente estado de conservación.
A pesar de su función de fortaleza militar, presenta una arquitectura cuidada y su ubicación se encuentra en un cruce de caminos hacia Aragón.
Tiene una torre en cada una de las esquinas de su planta cuadrada. Entre ellas destaca la Torre del Homenaje, con cuatro torrecillas en los vértices que repiten en miniatura el patrón de la torre principal.
Su buen estado también responde a las numerosas restauraciones que se le han ido practicando desde los 60, en especial cuando comenzó a albergar varios espacios de interés para los visitantes.
Por ejemplo, en su Torre del Homenaje se ubicó un museo dedicado a la novela de Camilo José Cela "Viaje a la Alcarria".
Por ejemplo, en su Torre del Homenaje se ubicó un museo dedicado a la novela de Camilo José Cela "Viaje a la Alcarria".
De la misma forma, también encontramos en su patio de Armas el Centro de Interpretación Turística de la Provincia de Guadalajara que, entre otras curiosidades, alberga bastante información sobre la Arquitectura Negra o el Románico Rural, convirtiéndose aún mas en una visita obligada en forma de introducción para aquellos que se desplazan hasta la Sierra Norte de Guadalajara desde allí.
Desde este punto, también podemos optar por conocer otros castillos de la Alcarria.
Hita. Una de las villas medievales más bonitas de España
Hita, considerada como uno de los pueblos más bonitos de España, nos pilla prácticamente de camino en nuestro viaje a la Sierra Norte, así que no podemos dejar de mencionarla.
Sin embargo, la villa que otrora luciese un castillo en lo más alto de su cerro -un punto muy estratégico para divisar en la lejanía-, en la actualidad destaca más por su urbanismo que por su castillo.
Su posición, cercana a la vía de comunicación entre las villas de Emérita, Augusta y César-augusta, también fue, como vemos, de relevancia durante época romana.
Nada más atravesar la muralla por la Puerta de Santa María o del Mercado, nos trasladamos a época medieval, idea que se reafirma cuando llegamos a la Plaza soportalada del Arcipreste.
Al estar construida en un cerro, las calles de Hita son empinadas y empedradas pero, si nos aventuramos a perdernos por ellas, es probable que acabemos llegando, en su parte alta, hasta las ruinas de San Pedro. Durante el s.XVIII fue la Iglesia más importante de Hita, aunque actualmente se conservan poco más que un gran arco y el altar de su construcción original. No obstante, el espacio fue restaurado en los años 90 como espacio cultural donde, entre otras cosas se llevan a cabo lecturas y representaciones del Libro de Buen Amor.
Junto a la iglesia, el Mirador de San Pedro tiene unas preciosas vistas sobre el Valle del Vadiel, perteneciente a la Campiña.
Si queremos llegar hasta el Castillo de Hita, deberemos ascender aún más hasta coronar el cerro, aunque a día de hoy, éste se encuentra en un estado de conservación ruinoso.
Jadraque. De fortaleza medieval a residencia renacentista
El castillo de Jadraque también es conocido como el Castillo del Cid, y no porque éste lo habitase jamás. Este título se debe al primer Conde del Cid, Rodrigo Díaz de Vivar y Mendoza: el hijo del Cardenal Mendoza, quien recibió este título de parte de los Reyes Católicos.
Al igual que sucede con Hita, se sitúa también en lo alto de un cerro y, de nuevo, cercano a una ruta romana. Lo encontramos a las afueras de la localidad de Jadraque, a orillas del río Henares.
Para acceder a él hay que subir a través de un sendero que discurre, estrecho y empinado, entre olivos.
Su construcción se produjo en el S.XV, por lo que es de época tardo-medieval. Por ello, a pesar de que conserva su estructura de castillo con una planta rectangular y dos torreones semicirculares que lo flanquean, se aprecia a la perfección su evolución hacia residencia palaciega renacentista. Su muro de sillarejo es ciego y sólo presenta unas pocas almenas.
Al contrario que los anteriores, se mantuvo en muy buen estado hasta que, en el siglo XIX, fue abandonado y la Villa de Jadraque lo adquirió. Su restauración comenzó hace algunas décadas como parte de un esfuerzo común entre los habitantes de Jadraque.
Actualmente es visitable en fines de semana y festivos, contactando con la Oficina de Turismo de la villa.
Fancy Image Box
Massive Dynamic has over 10 years of experience in Design. We take pride in delivering Intelligent Designs and Engaging Experiences for clients all over the World.
Fancy Image Box
Massive Dynamic has over 10 years of experience in Design. We take pride in delivering Intelligent Designs and Engaging Experiences for clients all over the World.
Cogolludo. De los Mendoza a los Duques de Medinaceli
Sucede con Cogolludo igual que con Hita.
Su casco histórico tiene muchos rincones encantadores por descubrir por lo que, si decides visitarlo, te sugerimos que hagas algunas paradas antes de ascender a su castillo.
Su casco histórico tiene muchos rincones encantadores por descubrir por lo que, si decides visitarlo, te sugerimos que hagas algunas paradas antes de ascender a su castillo.
La más evidente es sin duda el Palacio Ducal renacentista, en la Plaza Mayor. Su almohadillado florentino revela que se trata de una construcción tardo-medieval, concretamente del S. XV. En su día, propiedad de los Duques de Medinaceli, actualmente puede visitarse su interior contactando con la Oficina de Turismo.
Además del palacio, también podemos visitar la Iglesia de Santa María, de época renacentista y cuya bóveda de crucería es digna de admirar.
Ahora sí, nos centramos ya en el castillo, que se alza en lo alto del pueblo de Cogolludo, puerta de entrada a la Sierra Norte de Guadalajara.
A pesar de su ruinoso estado, sigue ofreciendo una bonita estampa en la que corona la villa.
De planta pentagonal y origen árabe, formó parte de la conocida como Marca Media, una línea defensiva musulmana que, durante más de 3 siglos, separó sus territorios de los cristianos. Cuando Alfonso VI lo conquistó en el siglo XI, era una construcción exenta que, más tarde, en el siglo XIII, se anexionaría a la muralla de Cogolludo.
A pesar de su ruinoso estado, sigue ofreciendo una bonita estampa en la que corona la villa.
De planta pentagonal y origen árabe, formó parte de la conocida como Marca Media, una línea defensiva musulmana que, durante más de 3 siglos, separó sus territorios de los cristianos. Cuando Alfonso VI lo conquistó en el siglo XI, era una construcción exenta que, más tarde, en el siglo XIII, se anexionaría a la muralla de Cogolludo.
Entre los propietarios del Castillo de Cogolludo estuvieron Doña Aldonza de Mendoza, el Marqués de Santillana o los Duques de Medinaceli.
Antes de marcharnos de Cogolludo, no podemos pasar por el Convento del Carmen, fundado a finales del siglo XVI. En su momento, además de la Iglesia, las celdas o el comedor, el Convento del Carmen contó con otras muchas zonas, como una enfermería, una biblioteca o un bonito patio con claustro.
Es una pena que gran parte de él se destruyese tras la Guerra de la Independencia, si bien recientemente se ha convertido en centro de congresos y festejos después de una muy bella restauración.
Hacia la Sierra Pela.
El Castillo de Galve de Sorbe
Si seguimos nuestro itinerario hacia el norte, esta vez sí, en plena Sierra, nos encontramos con el Castillo de Galve de Sorbe, situado al noroeste de la población y fuera de ella.
Lo que más llama nuestra atención es su imponente torre del homenaje, al norte de su muralla en forma de cuadrilátero. En cada una de sus esquinas, se alzan torres defensivas cuadradas, además de las circulares de las orientaciones este y sur.
La construcción original data del siglo XV. En este momento fue levantado sobre una antigua fortaleza musulmana por el infante Don Juan Manuel para la Casa de Zúñiga.
Posteriormente, la propiedad del Castillo de Galve, fue pasando de mano en mano, incluyendo la Casa de Alba o el estado hasta que, finalmente, fue subastado en los años 70, cayendo en manos de un particular.
Éste practicó una serie de reformas que incluyeron, entre otras reformas, el acondicionamiento interior para ser habitado o unas nuevas y exageradas almenas que, en conjunto, modificaron la estructura original del monumento. Por este motivo, las obras fueron intervenidas y paralizadas, lo cual desembocó en su abandono.
Aunque en la actualidad no se puede acceder al interior, merece la pena subir hasta lo alto del cerro por las vistas que ofrece sobre el Valle del Sorbe y la Sierra de Pela.
Fancy Image Box
Massive Dynamic has over 10 years of experience in Design. We take pride in delivering Intelligent Designs and Engaging Experiences for clients all over the World.
El Castillo de Atienza, "peña mui fuert"
Entre nuestras menciones, no podíamos pasar por alto el castillo de Atienza que, de nuevo, tiene su origen en una fortaleza musulmana. La figura simbólica que reconocemos corresponde a su torre del homenaje, que se eleva imponente sobre una roca. Tanto es así, que el mismo Cid Campeador no quiso enfrentarla a luz de día por considerarla “peña mui fuert”.
Junto a ella, la fortaleza aún conserva su pórtico de acceso, con su arco de medio punto, anexo a un torreón cuadrado.
Atienza, o la antigua Tythia celtíbera, fue un muy estratégico enclave -casi en el límite con Soria y muy cercano a Sigüenza- que codiciaron primero romanos y musulmanes después. Sin embargo, también fue uno de los puntos que ofreció mayor resistencia ante las tropas romanas.
Finalmente, en el siglo XII, Alfonso I la conquistaría para territorio cristiano.
La imagen del Castillo de Atienza se viralizó durante marzo de 2019 tras ser elegido por HBO para promocionar su la entrega final de Juego de Tronos. Durante una semana instaló frente a él uno de los seis tronos de hierro que repartió por todo el mundo. Este hecho congregó a miles de visitantes en Atienza.
Además del castillo, merece mucho la pena callejear por la ciudad medieval. Especialmente icónicos son su Arco de Arrebatacapas, su balcón de esquina o su soportalada Plaza del Trigo.
El castillo roquero de Riba de Santiuste
Si, desde Atienza tomamos dirección Sigüenza, en el camino nos encontramos con una de sus pedanías. El Castillo de Riba de Santiuste, de nuevo, tiene un origen musulmán. Fue construido en el siglo IX, durante la época andalusí, aunque a finales del siglo XII, el obispado de Sigüenza lo reformó.
Se trata de un castillo roquero o montano, encaramado en lo alto de un escarpado cerro. Además de un carácter inexpugnable, le confiere unas excepcionales vistas sobre Riba de Santiuste y todo el Valle del Río Salado. Su imagen nos recuerda al de Atienza, al de Zafra o al Castillo de Anguix.
Aunque no es tan monumental como algunos de los mencionados, conserva el carácter recio de fortaleza altomedieval. Consta de un alargado recinto amurallado almenado orientado de norte a sur, y varios torreones de refuerzo.
Hasta él se llega a través de un estrecho camino que dificultaría aún más su complicado asedio.
Su estado de conservación es relativamente bueno, ya que fue recientemente restaurado.
Palazuelos.
Ciudad medieval amurallada
Ciudad medieval amurallada
Muy cerca de la Riba y poco antes de llegar a Sigüenza, merece una parada el pueblo de Palazuelos. Es uno de los pocos que conserva casi íntegra toda la muralla que rodeaba a la ciudad medieval. De hecho, se accede a él a través de sus puertas.
El castillo corresponde al punto más fuerte del amurallamiento, que parte desde él rodeando la población. En cada uno de sus ángulos se levantan torres cilíndricas y, anexa al muro oeste, encontramos la torre del homenaje.
Su construcción fue ordenada por el Marqués de Santillana al arquitecto Juan Guas.
Entre sus sucesivos herederos destacó la Princesa de Éboli. Actualmente el castillo es propiedad privada y sólo puede visitarse el exterior. Se encuentra en proceso de restauración.
Entre sus sucesivos herederos destacó la Princesa de Éboli. Actualmente el castillo es propiedad privada y sólo puede visitarse el exterior. Se encuentra en proceso de restauración.
Sigüenza y el Castillo de los Obispos
El patrimonio cultural y artístico de Sigüenza es impresionante. Aunque bien podríamos hablar sobre su catedral, sus iglesias románicas o su conocido Doncel, aquí nos centraremos en su castillo.
El Castillo de los Obispos de Sigüenza se erige también sobre una fortaleza musulmana del siglo VIII. Si bien, la primera noticia de su existencia es en el siglo XII, cuando los Obispos lo convierten en su residencia habitual. Así sería hasta mediados del siglo XIX, convirtiéndose en la única fortificación residencial religiosa de España.
Durante todo este tiempo, fue ampliamente reformado varias veces.
El Castillo de los Obispos de Sigüenza se erige también sobre una fortaleza musulmana del siglo VIII. Si bien, la primera noticia de su existencia es en el siglo XII, cuando los Obispos lo convierten en su residencia habitual. Así sería hasta mediados del siglo XIX, convirtiéndose en la única fortificación residencial religiosa de España.
Durante todo este tiempo, fue ampliamente reformado varias veces.
El monumento quedó en bastante mal estado tras las Guerras Carlistas y, posteriormente, tras la Guerra Civil. Todo ello forzó a una restauración prácticamente completa antes de que en 1972 se convirtiera en Parador Nacional.
Su gran recinto amurallado alberga un amplísimo patio interior que incluso contaba con un pozo. Estaba preparado para ofrecer asilo a la ciudad de Sigüenza en caso de ataque. En el interior albergaba varias capillas, salas de justicia e incluso cárceles y tribunales. En el exterior estaba rodeado por una muralla con puente levadizo.
Su planta es rectangular y sólo las torres que lo flanquean -todas de la misma altura- rompen la monotonía de su silueta.
Su condición de Parador hace completamente visitables tanto su exterior como su interior. De hecho, las dependencias que observamos están recreadas de forma muy similar a las originales.
Fancy Image Box
Massive Dynamic has over 10 years of experience in Design. We take pride in delivering Intelligent Designs and Engaging Experiences for clients all over the World.
Fancy Image Box
Massive Dynamic has over 10 years of experience in Design. We take pride in delivering Intelligent Designs and Engaging Experiences for clients all over the World.
El Barranco del Río Dulce.
Castillos de Pelegrina y Guijosa
Si queremos prolongar un poco más nuestra ruta entre castillos hacia el Señorío de Molina, Pelegrina y Guijosa son dos buenas opciones.
El pueblo de Pelegrina es uno de los principales accesos al Barranco del Río Dulce. Si os gusta el turismo de naturaleza, es un punto excepcional para la observación de aves.
Su castillo, hoy en día algo ruinoso, se alzaba muy cercano a la importante vía romana Emérita-Augusta. Desde lo alto podía divisarse e incluso comunicarse con la Fortaleza de Torresaviñán. Aunque en un primer momento fue propiedad de los obispos de Sigüenza, Pedro I se lo arrebataría después para sostener su Guerra con Aragón. Llegó a ser incendiado y desmantelado durante la Guerra de Sucesión y la Guerra de la Independencia respectivamente.
Su castillo, hoy en día algo ruinoso, se alzaba muy cercano a la importante vía romana Emérita-Augusta. Desde lo alto podía divisarse e incluso comunicarse con la Fortaleza de Torresaviñán. Aunque en un primer momento fue propiedad de los obispos de Sigüenza, Pedro I se lo arrebataría después para sostener su Guerra con Aragón. Llegó a ser incendiado y desmantelado durante la Guerra de Sucesión y la Guerra de la Independencia respectivamente.
Por otra parte, el Castillo de Guijosa, se encuentra mucho mejor conservado. De nuevo, como sucedía con Jadraque, encontramos un castillo que evolucionó a residencia palaciega. Se construyó a mediados del siglo XIV, llegando a contar con un foso, actualmente desaparecido.
El castillo de Guijosa presenta una disposición clásica. Su gran torre del homenaje está adornada con ventanas, balcones y matacanes. Se encuentra en el interior, rodeada por una muralla con torres semicirculares en sus esquinas.
Sólo puede visitarse su exterior.